La historia del shaman indonesio Aman Paksa es la historia de la esencia de la humanidad. Del anhelo de una vida mejor y de los sinsabores que a menudo nos encontramos en el camino. La historia del viajero noruego Audun Amundsen es otra versión, en sentido contrario, de la misma búsqueda. El punto de partida es una vida inundada por ese llamado progreso en busca de una mayor simplicidad; de otros valores. Su búsqueda también tendrá sus sinsabores.
El significado de la palabra progreso ha sido una cuestión que ha acechado a la humanidad prácticamente desde que hay registros escritos. Tal y como la entendemos ahora, la idea de progreso bebe de la tradición occidental de la época moderna y contemporánea. Una tradición que ha visto el progreso como sinónimo de avance científico, urbanización y, en última instancia, de alejamiento de la naturaleza.
Hasta tal punto que muchxs se sienten cada vez más desconectados de ese modelo y buscan alternativas en otras costumbres y culturas. Es lo que le pasó al propio Amundsen, quien relata en su documental Newtopia, que abrirá el festival Another Way Festival que comienza el próximo 22 de octubre, por qué él mismo decide alejarse de la «modernidad» y pasar tres años en la tribu de Aman Paksa. Por su parte, Aman Paksa sabía poco de ese llamado «progreso» cuando conoce a Amundsen hace más de 15 años en Mentawai, un pequeño conjunto de islas dentro del enorme archipiélago que conforma Indonesia.
Amundsen llegaba con sueños de una vida más simple, más conectada con la naturaleza. Y se encuentra que esa simpleza es mucho menos paradisiaca de lo que se había imaginado. «Nunca he sentido mi cuerpo descomponerse tan rápidamente como en la jungla: infecciones, parásitos, gusanos intestinales», relata el noruego. Mientras, Aman Paksa va descubriendo algunas de las ventajas de la modernidad: un motor que le permite salir a pescar y tener más comida, plástico con el que conservar mejor su comida, electricidad…
Amundsen es reticente al principio al ver cómo su sueño de pureza se desmorona con esas pequeñas «innovaciones» que Aman Paksa introduce y siente tentaciones de eliminarlas de su película. Pero a medida que el tiempo pasa, la selva va haciendo mella en el noruego. «A estas alturas ya he conocido la crueldad de la selva. Ahora entiendo por qué Aman Paksa busca una vida mejor», dice.
Pero eso no lleva a Amundsen a hacer apología de la modernidad. El camino que recorre el shaman cuando se muda a Padang, la ciudad más cercana a las Mentawai, es también tortuoso. Muchas más horas de trabajo que en la selva, dinero que no siempre llega, un ambiente estresante y contaminado. Y hambre. «Si pasamos hambre, eso no es moderno. Es la muerte», dice un trabajador indonesio en la película.
Aman Paksa termina volviendo a Mentawai, pero nunca más será lo mismo. Se construye una casa, en la que tiene televisión y otros «lujos» impensables durante su vida en la jungla. «Es demasiado tarde para arrepentirse», dice el noruego cuando lo ve.
Quizá lo más interesante del documental es que no nos da respuestas y deja todas las preguntas abiertas. Porque no hay respuesta simples. Y porque cada unx, probablemente, tiene su propia respuesta. ¿Existe un término medio en el que todxs podamos convivir sin todas esas frustraciones. ¿O seremos, para siempre, unxs insatisfechxs empedernidxs?
El documental abrirá el Another Way Festival sobre Progreso sostenible y podrá verse en la Cineteca de Madrid el 22 de octubre, a las 20.00h y la durante toda la semana en streaming.