«Cooperar para transformar, fortaleciendo herramientas para ampliar el Mercado Social». Así se define este proyecto, que busca fondos a través de la plataforma de crowdfunding Goteo.org. Su propuesta pretende, nada más y nada menos, que crear una red de producción, distribución y consumo de bienes y servicios «que funcione con criterios éticos, democráticos, ecológicos y solidarios» en un territorio. Una red que reúna a productores y consumidores, individuales o colectivos.
La idea central es clara: la web serviría como un lugar de encuentro y relacionaría diversas experiencias, desde monedas locales a mercados en red. Se contaría además con un sistema de certificación propia que facilitaría garantías al consumidor.
Esta propuesta de creación de un Mercado Social es apenas una de las muchas iniciativas que están surgiendo en España al calor de la crisis, así como sucedió en la Argentina después de la debacle de 2001: monedas sociales, mercados de trueque, bancos de tiempo. Muchas ya existían; de hecho, esta propuesta está vinculada a la Red de Economía Alternativa y Solidaria (REAS), nacida en 1995, a la que pertenecen 200 entidades en diversos territorios de toda España.
Pero es indudable que, con la crisis, proyectos que ya existían reciben mayor visibilidad y adhesiones, y surgen cada vez más iniciativas. Primero, porque el hambre agudiza el ingenio, y cuando se acaban los euros, se inventan las monedas alternativas o los bancos de tiempo. Y, también, porque la crisis financiera internacional y la crisis social provocada por las medidas aplicadas por unos gobiernos empeñados en rescatar a los bancos a costa de los ciudadanos ha evidenciado en nuestro Primer Mundo lo que ya era evidente a escala global: lo deshumano y absurdo de un sistema que lo convierte todo en mercancía, empezando por las personas, reducidas a trabajadores o consumidores, y fácilmente descartables.
Cada vez más personas que se convencen de que hay cosas más importantes que la maximización del beneficio monetario: la sostenibilidad ambiental, la utilidad social, la equidad. Este programa de Salvados ofrece algunas alternativas interesantes. Dicen que crisis es oportunidad, y esta tal vez lo sea más que ninguna otra.