Las grandes marcas de ropa despliegan cantidad de recursos de marketing para maquillar de verde sus prendas e intentar convencer a las personas consumidoras de que están minimizando su impacto. En Carro de Combate lo sabemos bien porque llevamos ya varios años haciendo seguimiento de estas estrategias a través de la investigación #ModaBasura. Pero no se puede bajar la guardia, porque las grandes marcas de moda rápida son cada vez más imaginativas con sus reclamos verdes. Por ello, acabamos de publicar, junto a CECU, el informe ‘Sombra aquí, sombra allá. Cómo la industria textil maquilla su imagen medioambiental’.
El estudio recoge las estrategias de lavado verde más recientes que grandes marcas de moda rápida realizan en España, a la vez que aporta medidas para eliminarlo. La industria de la moda es responsable de hasta un 10% del total de las emisiones de efecto invernadero según datos de United Nations Climate Change, lo que supone más que la industria de la aviación y el tráfico marítimo combinados. Además de ser la más demandante de agua -se estima que para elaborar unos vaqueros se necesitan entre 2.000 y 3.000 litros de agua, según el modelo-, y el proceso de producción genera una importante contaminación que va a parar a las aguas residuales, especialmente debido al uso de tintes y procesos químicos.
En 2020 un estudio realizado por la Comisión Europea mostraba que el 53,3% de los reclamos verdes constituía información vaga, engañosa o infundada sobre las características medioambientales de los productos. En los últimos años con al auge del comercio online y el papel relevante de los influencers en la publicidad, se han multiplicado las prácticas de lavado verde convirtiéndolo en un grave obstáculo para las personas consumidoras que quieren ejercer su derecho a un consumo sostenible con el que acompañar la transición ecológica.
Puedes leer el informe aquí.