El verano ya está aquí y algunos de nuestros hábitos cambian. Much@s nos vamos de vacaciones, los niñ@s están sin colegio aunque sigamos trabajando, vamos a más sitios de ocio, cambiamos de armario, hacemos cosas nuevas… Muchos cambios que requieren redoblar muchas veces esfuerzos para no desviarnos de nuestros objetivos de consumo responsable. Ya lo hemos dicho muchas veces: no hay que obsesionarse, pero un poco de planificación suele ayudar. Así que utiliza nuestra agenda para organizar tus días de verano y que todo sea mucha más sencillo.
En esta reorganización, este mes de julio os planteamos repensar el famoso eslogan de las 3Rs, ya que muchas veces se ponen todas al mismo nivel, o incluso se nos ha hecho creer que el reciclaje es la acción más importante para reducir nuestra huella medioambiental.
Sin embargo, el impacto del reciclaje es aún elevado y la primera R que debe prevalecer es la de reducir el consumo (que algun@s llaman rechazar). ¿Cuántos pantalones tienes en el armario que no te has puesto nunca o tan sólo un par de veces? ¿Cuántas cosas inservibles se acumulan en tus cajones? ¿Cuánta comida se te estropea en el frigorífico porque compras demasiado? Como decíamos, la organización es básica:
- Haz un menú de la semana y luego una lista de la compra acorde y no te salgas de ella cuando vayas al mercado.
- Haz lo mismo en épocas como ahora de rebajas. Si tienes pensado comprar ropa este mes, piensa antes de salir de casa en qué necesitas.
- Antes de comprar algo piensa si lo necesitas y si realmente lo vas a utilizar. Como recomienda Mertxe Pasamontes (junto con muchos otros consejos muy interesantes para no caer en el consumismo que puedes consultar aquí), no lo compres inmediatamente. Date al menos dos semanas y si al cabo de ese tiempo sigues pensando que te aportará algo, cómpralo.
- Haz el mismo ejercicio cuando te regalen algo. Si no es algo que realmente sea útil, no lo aceptes.
- Y si has decidido que vas a comprar algo, busca alternativas que sean social y medioambientalmente responsables.
Dentro de esos objetivos de reducir el consumo, está el uso de los plástico, especialmente los de un solo uso. Así, aunque durante el mes de junio ya hubo una semana de boicot a los plásticos, desde hace varios años se celebra la iniciativa global Julio Sin Plásticos, que busca eliminar el uso de plástico de un solo uso durante este mes. El blog de Esturirafi nos cuenta un poco de la historia de esta iniciativa y da consejos para que sea más fácil eliminar este tipo de plásticos de nuestras vidas. En el link podrás encontrar además links interesantes con consejos para cada tipo de producto y lecturas recomendadas. En el post que publicamos con motivo de la semana de boicot a los plásticos también dabamos consejos, además de recordar que el Informe de Combate sobre el plástico es ahora de acceso libre para tod@s nuestr@s lector@s y no sólo para mecenas.
Os recomendamos también leer el libro de Toni Lodeiro ‘Consumir menos, vivir mejor’ que se puede consultar de forma abierta y gratuita aquí.
La segunda R es reutilizar, ya sean cosas de segunda mano, cosas antiguas que tengamos en casa que aún sirvan o que se puedan reparar u otras que ya no sirven para su propósito original, pero que se pueden utilizar de otra manera. Si no sabes cómo hacerlo, encontrar un Repair café puede ser una buena forma de empezar. Aún no hay muchos en España (sólo seis), pero si vives en Madrid, Zaragoza, Barcelona, Gijón o Toledo, son una opción (Aquí puedes ver el mapa de los repair cafés). La revista Opcions recopila además en este artículo algunas iniciativas interesantes para iniciarse en esto de la reparación. También puedes consultar la web de iFixit, donde hay miles de manuales de reparación, aunque buena parte de los recursos están en inglés.
La última es reciclar, una R que veremos más en profundidad en el mes de septiembre.
Y, por supuesto, este mes no podemos olvidarnos de nuestras opciones de turismo. El turismo puede ser una importante fuente de recursos para algunas comunidades y países, pero puede tener también un efecto devastador en algunos lugares. Estos son algunos consejos para practicar un turismo más responsable:
- Infórmate. Es la regla de oro. Es muy difícil ser responsable en un lugar del que apenas se conoce nada. Si vas a ir a un lugar desconocido, intenta hacerlo con referencias de personas en las que confías y que conocen la zona.
- Explora tu región. No hace falta irse a Tailandia para tener unas vacaciones merecedoras de tu Instagram. El avión es una de las formas de transporte más contaminantes (junto con el coche, según el número de pasajeros que vaya en cada uno), por lo que es recomendable reducir su uso. Y como hemos sabido últimamente, los cruceros tienen también una huella ecológica muy alta y es una opción que cada vez atrae a más usuari@s, así que tampoco son una opción sostenible.
- Cuidado con los animales salvajes como atracción turística. En muchos países, los animales salvajes se han convertido en un reclamo para turistas. Montar en elefante, posar con tigres, abrazar orangutanes… todo ello supone un maltrato para los animales. Participa solo en actividades para ver a animales en libertad y en sus entornos naturales, siempre y cuando estén gestionados de forma responsable.
- Busca un hotel sostenible. Cada vez hay más opciones de alojamientos responsables. Algunos son mejores que otros, y no siempre es posible acertar, pero en Wecoplan se pueden encontrar opciones. Si vas fuera de Espana, consulta la página Ecobnb.
¿Tienes más consejos para reducir tu consumo o para viajar de forma más sostenible? Tienes los comentarios abiertos si quieres añadirlo a la lista.
¡Nos leemos en agosto!